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26 Octubre 2023

Guía del centro

Desde la Alameda del Boulevard, dejando la Parte Vieja a tu espalda, se abre una zona completamente diferente a las demás: el centro de San Sebastián. En esta guía viajarás en el tiempo hasta la Belle Époque entre edificios de estilo palaciego y arquitectura parisina, conocerás uno de los tradicionales mercados y descubrirás la elegancia que se respira paseando por Miraconcha.

¿Qué ver en el centro de San Sebastián?

1. Teatro Victoria Eugenia, Plaza Gipuzkoa y Avenida de la Libertad

Las fachadas del centro y los edificios emblemáticos que se construyeron desde que la reina María Cristina disfrutara de los veranos en la ciudad han aportado un estilo francés a San Sebastián. Empezando por el Teatro Victoria Eugenia, a orillas del río Urumea con vistas al Kursaal, este edificio de estilo neo plateresco y renacentista se convirtió en punto de encuentro de la alta sociedad. Hoy cuenta con una variedad de actividades de ocio y culturales de lo más interesante para niños y adultos, como el reconocido Festival Internacional de Cine de San Sebastián, entre otros.

Detrás de este histórico edificio se encuentra la Plaza Gipuzkoa, rodeada de casas de estilo palaciego. Las coquetas cafeterías a su alrededor son el lugar perfecto para disfrutar de un momento de tranquilidad, mientras los niños se divierten alimentando a los patos que viven en el estanque de la plaza. ¡No puedes irte de aquí sin descubrir su templete meteorológico, la mesa horaria y el gran reloj de flores!

Por las calles del centro de la ciudad se observan detalles característicos de la arquitectura parisina, y ejemplo de ello es la Avenida de la Libertad. Una amplia calle que desde el derribo de las murallas en 1864 se ha convertido en la principal zona comercial de San Sebastián, donde todavía hoy se siente la elegancia de la élite del siglo XIX.

2. Mercado De San Martín y Catedral del Buen Pastor

San Sebastián es una ciudad viva en costumbres donde no faltan las visitas a los tradicionales mercados, como el de San Martín. Inspirado en las galerías de Les Halles de Bayona, este histórico mercado de abastos se construyó en 1884. Hoy, sigue siendo el establecimiento de confianza de muchos chefs de renombre y familias de la ciudad por la gran oferta de productos locales y de temporada que ofrece, y el trato cercano que reciben las personas que acuden. Sin duda, una experiencia que merece la pena vivir en una visita a San Sebastián.

Mientras el mercado de San Martín daba sus primeros pasos en el siglo XIX, la ciudad observó cómo se construía la Catedral del Buen Pastor. A escasos metros del mercado, la catedral es el edificio religioso más alto de la ciudad, ubicado en una amplia plaza rodeado de pequeños comercios locales, cafeterías y restaurantes en los que disfrutar del aperitivo o una buena comida. La visita se vuelve aún más interesante cuando descubres que el órgano en su interior es uno de los más grandes de Europa. Una parada obligatoria que de noche tiene aún más encanto, por la iluminación de la catedral en combinación con las luces de la ciudad.

3. Ayuntamiento y La Perla

Si algo nos viene a la mente cuando hablamos de San Sebastián es, sin duda, la playa de La Concha. Un paraíso en pleno centro de la ciudad que deja fascinado a cualquier viajero. Su icónica barandilla te llevará por un recorrido en el que seguirás adentrándote en la era de la Belle Époque. Son tres los emblemas que tienes que apuntar en este paseo – seguro que te sorprenderá su belleza arquitectónica –.

¿Conoces los típicos casinos de ciudades de la Costa Azul con amplios jardines de ensueño? Sin ir más lejos, el Ayuntamiento de San Sebastián recrea esa escena con un edificio típico del sur de Francia, que curiosamente cuando se construyó en 1887 también fue un casino. Lo acompañan los jardines de Alderdi Eder, llenos de flores coloridas y un carrusel con vistas a la Bahía de La Concha, ideal para disfrutar como niños.

Con edificios señoriales a un lado y la isla Santa Clara – que te animamos a visitar – en mitad de la bahía, en el paseo de La Concha te encontrarás con el centro de talasoterapia La Perla, otro símbolo de la Belle Époque en la ciudad. Es sabido que la reina María Cristina quedó asombrada por la belleza de San Sebastián y los baños relajantes siempre estaban en la agenda de la realeza. De ahí que el antiguo balneario de madera se reformara para construir uno nuevo, considerado de los más bonitos del mundo, según informaban los medios de comunicación a principios del siglo XX. Hoy sigue manteniendo su esencia y belleza y se ha convertido en el momento de desconexión perfecto para los donostiarras y viajeros… ¡Las vistas a la bahía te enamorarán, como a la reina!

4. La belleza de la perla del cantábrico

Es innegable que San Sebastián ha destacado por su estilo sofisticado, atrayendo las miradas de las aristócratas ya en el siglo XIX y viajeros de todo el mundo hoy en día. Desde que el centro comenzara a expandirse, cada zona ha sabido mantener la esencia y la belleza que siempre ha caracterizado a la ciudad.

El encanto de sus jardines, la excelencia de los edificios y sus espectaculares vistas frente al mar han convertido el centro de la ciudad en un sueño real. Sin olvidar la gastronomía, que difícilmente te defraudará en este destino lleno de bares y restaurantes en los que disfrutar de la auténtica cocina vasca.

DÓNDE COMER EN SAN SEBASTIÁN

Esperamos que esta zona te sorprenda tanto como a nosotros y quieras seguir paseando por La Concha hasta llegar al Antiguo – ¡un barrio con otra playa y parque de atracciones! –. Además, para que tu experiencia sea de lo más enriquecedora, te animamos a visitar nuestro blog y descubrir qué ver en San Sebastián y alrededores. Y si viajas con toda la familia, ¡descubre qué hacer en San Sebastián con niños!